Uno de cada cuatro castellanos y leoneses de 15 a 64 años reconoce haberse emborrachado en los últimos 12 meses
La reunión programada para el próximo 22 de noviembre entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, será la última de una serie de encuentros desarrollados en el Palacio de la Moncloa entre máximos representantes de España y Castilla y León, con algunos temas recurrentes y atascados durante décadas.
Del inicial diálogo para echar a andar la Autonomía y sobre el traspaso de competencias al más actual problema de la falta de médicos o la despoblación, hay otros temas que se mantienen en la agenda pase el tiempo que pase, como las infraestructuras, la financiación autonómica y los criterios de reparto de esos fondos.
En los primeros años de autonomía hubo varias reuniones en Moncloa entre Felipe González y Demetrio Madrid, aunque sin referencias temporales concretas, en un momento en el que la institucionalidad estaba también en su fase más inicial, según ha explicado a EFE el primer presidente de Castilla y León, mientras que no consta encuentro alguno en el palacio presidencial de José Constantino Nalda.
Posteriormente, Felipe González recibió a José María Aznar (1989), Jesús Posada (1990) y Juan José Lucas (1991); posteriormente Aznar, ya como presidente del Gobierno de España, recibió a Lucas en dos ocasiones (1996 y 2000).
Después llegó la etapa de los dos encuentros entre Aznar y Juan Vicente Herrera (2001 y 2003), seguidos de las cinco reuniones entre José Luis Rodríguez Zapatero y Herrera (2004, 2006, 2007, 2008 y 2009), mientras que con Mariano Rajoy únicamente se produjo una reunión en Moncloa con Herrera (2012).
Ya con Pedro Sánchez como presidente del Gobierno recibió a Herrera (2018) y posteriormente tuvo lugar el primero de sus encuentros con Alfonso Fernández Mañueco (2022), por lo que el del próximo 22 de noviembre será el segundo del actual presidente y el decimosexto entre los máximos representantes de los gobiernos de España y Castilla y León.
Así fueron los encuentros previos y así se prevé el siguiente:
Demetrio Madrid ha explicado a EFE que hubo varias reuniones en Moncloa con Felipe González, en los que trataron principalmente el traspaso de competencias y sobre el marco en el que se estaban desarrollando los estatutos recién aprobados. Con las estructuras autonómicas aún sin desarrollar, era necesario concretar los funcionarios, edificios, presupuestos y competencias que se transferían, sobre todo en materia de agricultura y cultura.
La aspiración de asumir nuevas competencias autonómicas por la vía de una reforma estatutaria, en un momento en el que Aznar hablaba de su "enorme preocupación" por las diferencias existentes entre unas comunidades y otras, marcó esta primera y única reunión entre ambos, la que salió otro de los clásicos de estos encuentros: las distintas velocidades en la España de las autonomías, lo que fue analizado en la Comisión Mixta de Transferencias.
El Estatuto de Autonomía aún estaba sin reformar y Posada defendió la necesidad de "dar el gran paso" para buscar por esta vía la igualdad respecto a otras autonomías, aunque González planteó como fórmula encontrar un pacto de Estado sobre estos cambios en las diferentes autonomías aspirantes a las reformas estatutarias.
La demanda de las competencias ampliadas volvió a marcar la reunión entre Juan José Lucas y Felipe González, aunque el dirigente de Castilla y León intentó también obtener respuestas sobre la financiación autonómica, la reforma del Reglamento del Senado -que se convertiría en una aspiración inalcanzada- y la colaboración entre ambas administraciones, además de comenzar a reivindicar avances en materias concretas, como las infraestructuras.
Poco a poco, el debate sobre el traspaso de competencias iba aterrizando en propuestas concretas, como las que Lucas reclamó en su primera reunión con Aznar, en referencia a las Cámaras Agrarias o el Inserso, aunque también las reivindicaciones en materia de infraestructuras se mantuvieron vigentes.
La segunda reunión entre Lucas y Aznar estuvo marcada por la reforma del modelo de financiación autonómica, ante la que Castilla y León presentó como principal aspiración que la participación en los ingresos del Estado por parte de las autonomías fuera al menos del 25 por ciento para garantizar la estabilidad del sistema, basado en la suficiencia financiera, la corresponsabilidad y la solidaridad, aunque las transferencias de Sanidad y las infraestructuras pendientes también tuvieron su espacio.
La primera de las nueve reuniones a las que asistió Juan Vicente Herrera, en este caso con Aznar, se centró en el traspaso del Insalud, ya inminente, y en la reivindicación del cumplimiento de los plazos del Plan Estatal de Infraestructuras referido a Castilla y León, con el compromiso concreto de Aznar de poner la primera traviesa de la línea de alta velocidad ferroviaria en Segovia, mientras que en financiación siguieron las reivindicaciones de los principios de suficiencia, la solidaridad y la corresponsabilidad.
La segunda reunión entre Aznar y Herrera, ya elegido en las urnas como presidente, desembocó en reuniones sectoriales en Sanidad, Medio Ambiente, Economía y Fomento, para avanzar en asuntos como el traspaso de las competencias sanitarias y la concreción de plazos en infraestructuras, vinculados también a la demanda de que Castilla y León accediera a un periodo transitorio respecto a las ayudas europeas tras dejar de ser 'Objetivo 1'. Por contra, la aspiración de asumir la Justicia comenzó su declive al no tener Herrera prisa.
Ya con el leonés José Luis Rodríguez Zapatero en la Presidencia del Gobierno de España y con Herrera al frente de la Junta, en 2004 arrancó el encuentro que más se repitió, hasta en cinco ocasiones, con referencias a los compromisos presupuestarios en infraestructuras de la Comunidad, con la primera referencia a la llegada del AVE a Valladolid en 2007 y también sobre avances en autovías, pero también con reclamaciones de más aportaciones para la Sanidad.
La salida del 'Objetivo 1' para la UE estaba a la vuelta de la esquina y Zapatero ofreció a Castilla y León conseguir 900 millones de euros del Fondo de Cohesión 2007-2013 como compensación, aunque a Herrera esto no le pareció suficiente, puesto que calculaba que las necesidades de financiación de la Comunidad eran de 1.500 millones.
El compromiso de Herrera y Zapatero para impulsar la tramitación del nuevo Estatuto de Autonomía de Castilla y León en las Cortes Generales, incluida la gestión del Duero, después anulada por el Constitucional, marcó esta reunión entre ambos y sirvió para que el presidente del Gobierno pusiera fecha a la esperada llegada del AVE a Segovia y Valladolid. Sería el 22 de diciembre, el día de la Lotería, pero sin soterramiento.
Ya se ha convertido en histórica la reivindicación de Castilla y León para limitar el peso que tiene la población en el modelo de financiación autonómica e introducir variables que ponderen el envejecimiento, la dispersión territorial, la ruralidad... Fue en esta reunión en la que, con un pacto de Comunidad bajo el brazo, Herrera comenzó a repetir estos argumentos. Que la población pese como máximo el 80% de la financiación, resumió Herrera ante Zapatero.
Celebrada en la víspera del Día de Reyes, fue una de las reuniones en las que Herrera salió más decepcionado ("ningún motivo de satisfacción", llegó a decir sobre ella), aunque el Gobierno se comprometió a estudiar la creación de un nuevo fondo -3.000 millones a repartir entre las autonomías menos dinámicas-, dentro del sistema de financiación. El objetivo, impulsar el crecimiento de la población, un problema que en los años siguientes han marcado uno de los quebraderos de cabeza de Castilla y León.
Pese a su buena sintonía, la única reunión entre Mariano Rajoy y Juan Vicente Herrera en Moncloa coincidió con el Día de Castilla y León, por lo que la tempranera visita a Villalar de los Comuneros acabó en el palacio presidencial para la reunión. De este encuentro se recuerda la reivindicación de un nuevo modelo de financiación autonómica que, a día de hoy, sigue sin materializarse y los buenos augurios de Rajoy sobre la reforma de la PAC.
Con la postergada reforma del sistema de financiación cada vez más demandada, el primer y único encuentro del actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y Juan Vicente Herrera incluyó entre otros temas la necesidad de articular una estrategia nacional contra la despoblación y las medidas de transición energética que dieran alternativa a las zonas afectadas por el cierre de las minas y las térmicas. En materia de infraestructuras, Sánchez se comprometió a que el AVE llegara a Burgos en 2020.
Los ecos de la pandemia de covid tenían aún una fuerte incidencia sobre las cuentas públicas, pero el primer encuentro en Moncloa de Alfonso Fernández Mañueco y Pedro Sánchez estuvo marcado por la actualidad de los incendios forestales, con el propósito de ambos de tratar de dejar esta materia fuera del debate político. En materia de financiación autonómica, sin rastro de la reforma del sistema, pero con abundancia de transferencia de fondos, especialmente los procedentes de la Unión Europea vinculados a la salida de la crisis.
El próximo episodio de este serial tiene ya fecha prevista -22 de noviembre- y también tendrá su propia historia. La negativa a hablar de forma bilateral de financiación autonómica sino en un ámbito multilateral, pero también la renuncia de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, a acudir a esta reunión con Sánchez, al sentirse insultada y como protesta por el acuerdo con Cataluña, ha enrarecido el ambiente en el entorno del PP.
El problema de la falta de médicos, las infraestructuras pendientes -con especial incidencia en las que afectan al denominado proyecto del Corredor Atlántico- y los acuerdos en materia de acogida de migrantes son algunos de los asuntos que la Junta de Castilla y León ha adelantado que serán objeto de las reivindicaciones de Mañueco.
Uno de cada cuatro castellanos y leoneses de 15 a 64 años reconoce haberse emborrachado en los últimos 12 meses
La cobertura frente al VRS supera el 88 %, si bien Sanidad hace un llamamiento a la inmunización en los niños nacidos a partir de abril antes de que comience la epidemia de bronquiolitis
Se celebrarían en la noche del 22 de abril en las nueve capitales de provincia y en Aranda de Duero, Miranda de Ebro y Ponferrada
Según un informe de la OCU, la Comunidad es la segunda en tiempos de espera para citas telefónicas, con 3,3 días, tras Asturias