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TeleRural (VII): Que el ritmo no pare

Zulema García viaja de pueblo en pueblo para impartir sus clases de gimnasia de mantenimiento a los mayores, en un servicio de la Federación de Pensionistas

TeleRural (VII): Que el ritmo no pare
José Ángel Gallego Vázquez
José Ángel Gallego Vázquez
Lectura estimada: 3 min.
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Su alegría y su sonrisa contagian de positividad a sus alumnas. Pone el alma en cada clase y eso se nota. Hoy TeleRural viaja con Zulema García, monitora de gimnasia de mantenimiento, que pone en forma a gran parte de los mayores de ocho localidades de Tierra de Campos.

La jornada comienza temprano. Zulema llega al centro cultural de Villabrágima con ganas. Cargada con su material y con sus ejercicios comienza puntual la clase. "Cada día intento usar un material diferente para que las sesiones no se conviertan en monótonas y así trabajar diferentes partes del cuerpo; utilizamos gomas, aros, pesas, balones, jugamos, bailamos... hacemos un poco de todo". Todas las clases comienzan con un calentamiento y tras la parte central, Zulema organiza una vuelta a la calma con estiramientos y relajación.

Tras 45 minutos intensos de actividad física y buen humor, la monitora apenas tiene cuarto de hora para llegar al siguiente pueblo. La actividad está organizada por la Federación de Asociaciones de Pensionistas y Jubilados de Valladolid, con más de medio centenar de poblaciones donde se ofrece este curso bautizado como 'Taller para la educación y mejora de la salud física y psíquica de las personas mayores'. Un programa de dos días a la semana, durante aproximadamente ocho meses al año, con una decena de monitores y que cuenta con el patrocinio de la Diputación de Valladolid. Además se ofrecen otras actividades de memoria y envejecimiento activo, financiadas por la gerencia de Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León.

La mayor parte de los participantes son mujeres, aunque en algunas poblaciones también se anima algún hombre. Es el caso de Vicente Adánez, de Morales de Campos. "Vengo a hacer un poco de ejercicio y pasar un buen rato con mis convecinas", añade al tiempo de bromear diciendo que es un "pueblo de cobardes", refiriéndose a que es el único varón en la clase.

Entre pueblo y pueblo, TeleRural puede charlar con Zulema García, que está encantada con su trabajo. "Es gente muy agradecida, te devuelven el doble de lo que les das". Porque este taller de gimnasia de mantenimiento va mucho más allá de la actividad física. "Es una labor social, una manera de entretenimiento, de que se muevan y no pierdan las habilidades, también es una manera de que se obliguen a salir de casa y puedan socializar", aclara la monitora, que siempre adapta sus sesiones al nivel y a la edad de sus alumnos.

"Es gente muy agradecida, te devuelven el doble de lo que les das"

Tras 45 minutos en los que ha trabajado usando como único elemento una silla, Zulema se despide con su impertérrita sonrisa. Siguiente destino: Tordehumos. Hoy toca trabajar con balones, hasta el masaje final se hace con este material. Sus alumnas están encantadas. "A mí me gusta todo lo que hacemos en gimnasia de mantenimiento, y si bailamos, mucho más", aclara una de las usuarias del programa.

La mañana va llegando a su fin, pero aún queda la cuarta de las poblaciones a las que tiene que viajar Zulema: Aguilar de Campos. Aquí la nave del baile acoge a un nutrido grupo de mujeres que hoy tendrán coreografía con música y pesas. Una divertida sesión que no se pierde Honorina Carrillo, una vecina de 90 años que dice que lo más importante a esta edad es "moverse y hacer ejercicio".

Tras una intensa jornada, Zulema -la TeleRural más movida de esta primera temporada- dice adiós. Mañana será otro día: con más pueblos, más actividad física y más sonrisas. Que el ritmo no pare.

 

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