Otoño y naturaleza son quizá la mejor combinación de turismo rural que ofrece nuestra comunidad y uno de esos ejemplos es el Castañar de El Tiemblo. Árboles centenarios, algunos de formas caprichosas, y un millón de colores diferentes por descubrir a cada paso.

El recorrido es más un paseo por el bosque que una ruta de senderismo propiamente dicha, pero esto no resta ni un ápice de disfrute a los que reunimos dos pasiones como son la naturaleza y la fotografía. El camino tiene una longitud de unos 4.5 km y en dos horas habremos conocido prácticamente todos los rincones de esta maravilla natural.

Para acceder al Castañar de El Tiemblo tendrás que coger un autobús o madrugar mucho para ser de los primeros que llegue al pequeño aparcamiento habilitado en el entorno llamado Área recreativa 'El Regajo'. Desde este punto comienza la ruta por esta joya natural que hace las delicias de cualquiera que lo visita. La facilidad de su recorrido hace que sea el plan ideal para disfrutar en familia y el entorno ideal para que las próximas generaciones aprendan a cuidar el planeta en que nos toca vivir.

Aun así, nos gustaría señalar que El Castañar de El Tiemblo es uno de esos lugares que pueden morir de éxito, de nosotros depende que siga vivo y goce de buena salud. La Plataforma Salvemos el Castañar lucha por regular el turismo en esta parte de la geografía avileña. La excesiva presión turística y la poca conciencia ambiental de muchos de sus visitantes puede hacer que en poco tiempo tengamos que ver como cierran al público este lugar como ya pasó con otros lugares como las islas Koh Phi Phi en Tailandia, donde el turismo de masas hizo que el ecosistema se resintiera demasiado.

Por esta razón te animamos a visitar este lugar, creemos que merece mucho la pena, pero con responsabilidad.

Puedes conocer la ruta de forma más extensa pinchando aquí.

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